cunato mas abre de esperas

Te tendré entre mis brazos antes que anochezca,
te esperare en la calzada antes que llegues.
Sonreiré hoy por ti antes que llores.

Caminare a tu lado aunque te resistas llamare a tu morada a cada instante.
Perturbare tus sueños,

con hermosas melodías y bañare tu cuerpo.
Con amor y alevosía.

Tendré tu nombre entre mis labios,

y tu rostro alumbrara mi sendero.
Pues tu carne será mi cena y tú alma mi cobijo y regocijo.
Seré quien te salve y quien te condene.

Seré el juez y el abogado.
De las causas perdidas
Lamentaras haber nacido, y desde ese día haberme conocido.
Me temerás, y me amaras en las tardes de soledad,
a mi aclamaras con gritos al despertar,

de las cansadas tardes de invierno, que con frió haz de marchar.
Pues mi nombre habrás de pronunciar cuando tu vida se habrá de acabar.
Pues mis llantos te abran de saciar,

con tu gran sed de acabar,

con la maldición, que un día habrán de entregar.
Soy la muerte a quien tanto haz de llamar.

Soy el llanto, con el cual te haz de saciar,

y son la ira de la cual te has de terminar.
Más bien soy tus ansías de esta vida acabar.